Corría el minuto 86 del Real Madrid-Real Sociedad. Ancelotti ordenó el cambio de Modric por Chema. El público del Bernabéu se puso en pie, los jugadores de los dos equipos hicieron dos filas y entre ellas se retiró Luka Modric, el jugador más laureado del club, con 28 títulos. Le esperaba en la banda Toni Kroos, con el que se fundió en un abrazo. Por los vídeomarcadores se podía leer 'Hvala, Luka' (Gracias Luka). Modric se abrazó luego a Ancelotti, a su mujer y a sus tres hijos, vestidos con la camiseta del Madrid. Los aplausos duraron casi cinco minutos.
Todo eso fue lo más emocionante de la tarde en que el Bernabéu homenajeó a Carlo Ancelotti y Luka Modric en un partido intrascendente ante una Real Sociedad cargada de suplentes para despedir una Liga que ha resultado para los blancos muy lejos de las expectativas creadas con la llegada de Kylian Mbappé.
Doblete
Mbappé marcó un doblete
Jugado bajo continuos cánticos de apoyo a Modric por parte de la grada de animación, el partido ya había tenido como prolegómenos la indignación de los foros digitales madridistas contra Florentino Pérez, dolidos los aficionados por su decisión de no renovar al croata un año más.
El único aliciente deportivo de la tarde era ver si Mbappé conseguía un gol y alcanzaba el liderato de la Bota de Oro por delante de Gyokeres y a la espera de lo que haga hoy Salah con el Liverpool. Marcó el francés por dos veces (uno tras un rechace de penalti) y se llevará el trofeo si Salah no marca cuatro o más mañana.
Con Vinícius de nuevo en la convocatoria pero sin ser titular (sí lo fue Brahim) todo consistió en pasársela a Mbappé para que este tratara de aumentar su cuenta goleadora. La Real ayudó a la tarea con un once irreconocible en el día en que también Imanol Alguacil se despedía del banquillo txuri-urdin tras seis años.
La Real Sociedad
Con muchos suplentes
Sin la tensión de los puntos, el juego fue un poco de área a área. El Madrid dominaba, con Modric a los mandos, pero la Real juegue quien juegue siempre es un equipo ordenado y el Madrid nunca estuvo cómodo, sin Bellingham por sanción y con jugadores muy fuera de forma, como Ceballos o Güler, al que la inspiración le ha durado muy poco.
En el 37, el árbitro, Melero López, fue al monitor del VAR y señaló penalti por manos de Pablo Marín al despejar un balón de Güler. Mbappé lo tiró al cuerpo de Marrero, pero luego aprovechó el rechace y marcó el 1-0.
La segunda parte empezó con la lesión de Brahim, que acababa de reaparecer, sustituido por Vinícius. También entró Vallejo por Tchouaméni. A la media hora se retiró Lucas Vázquez, otro que se va, y se llevó una ovación tremenda del Bernabéu. Cerró el partido Mbappé, tras un pase de Vinícíus y batir a Marrero, su gol número 31 en la Liga y el 42 de la temporada.
Los homenajes
El recuerdo de las remontadas europeas
Acabado el partido, vinieron los homenajes. El entrenador italiano habló desde el césped, micrófono en mano y la voz rota: “Ha sido fantástico compartir con vosotros estos momentos”. Luego recordó las remontadas europeas en noches mágicas.
Por último habló Luka Modric, también con la voz emocionada: “Llegó el momento que nunca quise que llegara. Ha sido un viaje largo, pero maravilloso. No llores porque terminó, sonríe porque sucedió. Hala Madrid y nada más”.
Modric y Ancelotti fueron manteados por la plantilla y dieron la vuelta al campo. Hvala Modric. Gracias Luka, señor del fútbol.